enero de 2013

Queridos amigos,

Felicitaciones de paz para el Año Nuevo.

Quiero compartir un mensaje de año nuevo con vosotros. Pero más que un mensaje, quiero compartir mi deseo puro y esperanza de que el año que empieza os beneficiéis a vosotros mismos y beneficiéis a los demás.

Éste no es sólo un año nuevo, sino que es el principio de una nueva era. Es la confluencia de tres cosas: (1) Por un lado es el Supremo que nos está dando señales a cada uno de nosotros diciendo: “Hijo, esto es lo que tienes que hacer”, (2) Por otro lado el Tiempo nos encara y nos dice: “Reconoce lo que tienes que hacer”, (3) Y entre el Tiempo y el Supremo, ¿permanecéis alerta, atentos y perspicaces de forma que podáis entender tanto las señales del Tiempo como del Supremo y sepáis lo que debéis hacer?

Hay una canción devocional muy antigua que dice: “Oh Dios, muestra el camino a los ciegos, ya que están deambulando (tropezando)”. Esto es lo que está sucediendo en el mundo en este momento. La mayoría de la gente del mundo no ve sus propias debilidades, y están sufriendo. Ahora es el tiempo para liberar al alma de estas debilidades y despertar a la conciencia del ser, preguntándonos, “¿Quién soy yo?” Aprendamos a ir profundo al interior, a desapegarnos del cuerpo y del mundo y las relaciones materiales.

Los seres humanos no son capaces de perdonarse unos a otros. Pero el Supremo es el Océano del Perdón, quien funde todo lo del pasado y nos da la fortaleza para perdonarnos a nosotros mismos y a los demás.

Dios es nuestro Protector. Mi deseo para el Año Nuevo es que no tengáis miedo, porque nuestro protector está aquí. No hay nada que temer. Experimentad Su compañía y tened la fe de que está viniendo un mundo de unidad y solidaridad.

Con amor y buenos deseos para el Año Nuevo y la Nueva Era,

BK Janki