Más allá de los límites autoimpuestos

La educación espiritual nos conduce a recuperar la comprensión y la experiencia de nuestra existencia holística como seres humanos, el conocimiento de que somos seres espirituales además de seres físicos, mentales y emocionales.

Hasta que se reconoce el elemento espiritual, la compasión que forma parte de la naturaleza humana no puede manifestarse. Una verdadera educación espiritual puede ser descrita como aprender de los demás, crecer a través de los demás, integrase con los demás y contribuir a los demás.

Solamente cuando de verdad estamos aprendiendo, podemos experimentar el crecimiento espiritual. Cuando crecemos, nos integramos con los demás y en esa integración se produce una contribución natural y mutua a la naturaleza y al ser de cada uno.

Estos cuatro procesos de educación están funcionando continuamente, pero solamente suceden de una forma agradable y significativa cuando los recursos espirituales propios están activados y son usados creativamente.

Estos recursos, en conjunción con la mente y el intelecto, enriquecen nuestra visión del mundo, la forma de interactuar con él y la forma en que individualmente creamos nuestro lugar en él. Estos recursos son las cualidades originales del yo. Con la conciencia de nuestra dimensión espiritual, empezamos a aprovechar y emplear estas energías positivas.

Nuestros recursos originales son muy simples: paz, amor, pureza, conocimiento y felicidad; las cinco cualidades del ser. Cuando retornamos nuestra conciencia a estas cualidades y las recordamos podemos interpretarlas como: Amor – cuido y comparto; Paz – armonizo y reconcilio; Pureza – respeto y honro; Conocimiento – soy y existo; Felicidad – expreso y disfruto.

Para entender y recordar estas cualidades, necesitamos reconocer las oscuras y pesadas sombras con que las nos hemos ensuciado o contaminado. A veces, no reconocemos los elementos contaminantes porque han llegado a arraigar tan profundamente en nuestra personalidad que decimos: “Yo soy eso”. No nos damos cuenta de que somos más que los límites que repetidamente nos ponemos a nosotros mismos.

Extracto del libro:
Pensamiento oriental para la mente de occidente.
Visión del Raja Yoga
Ed. Brahma Kumaris
Anthony Strano

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